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Montblanc es un hermoso pueblo rodeado de una exuberante naturaleza. Sus alrededores ofrecen una amplia variedad de paisajes naturales, desde montañas hasta ríos y valles verdes.
Descubre Montblanc, un verdadero tesoro medieval en Cataluña. Su impresionante patrimonio histórico convierte gran parte de su núcleo urbano en un auténtico monumento que te transportará a épocas pasadas.
El legado de su pasado se manifiesta en la famosa Semana Medieval, una festividad arraigada en la leyenda de Sant Jordi y el dragón, situada por el renombrado costumbrista Joan Amades en la capital de la Conca de Barberà. Pero eso no es todo, Montblanc también alberga yacimientos arqueológicos que abarcan desde pinturas rupestres paleolíticas hasta restos de asentamientos íberos, completando así este extraordinario patrimonio.
Ubicado en el valle del Francolí, en el punto de encuentro con el río de Anguera, Montblanc se ha convertido en el centro comercial de la comarca de la Conca de Barberà, gracias al auge del turismo. La localidad cuenta con un amplio número de empresas de servicios y ofrece una gran variedad de actividades para satisfacer a los visitantes.
Desde el momento en que pongas un pie en Montblanc, te sorprenderá su atractivo visual. No es de extrañar que en 1947 se declarara el conjunto del municipio como Conjunto Monumental y Artístico, lo que da una idea de la cantidad de alicientes que ofrece a los visitantes.
La monumentalidad comienza desde sus orígenes más remotos: los yacimientos íberos del Pla de Santa Bàrbara y los vestigios medievales del Molí Vell son ejemplos impresionantes y una primera parada obligatoria en esta ruta histórica.
Destacando entre sus tesoros se encuentra el recinto amurallado del siglo XIV, donde aún se conservan torres y portales que te transportarán a la época medieval. Dentro del núcleo urbano, la calle de los Jueus es una joya que testimonia la presencia de la comunidad judía durante la Edad Media. Y no podemos olvidar el Puente Viejo, que, aunque probablemente de origen romano, se presenta hoy en día con su imponente estructura del siglo XII.
La naturaleza que rodea a Montblanc es rica y diversa. La zona es conocida por sus bosques de pinos y robles, los cuales ofrecen un agradable aroma a la región. También se pueden encontrar extensas áreas de campos de cultivo y prados, que brindan un aspecto rural al paisaje.
Los ríos y arroyos que atraviesan la zona de Montblanc son una fuente vital de vida para la flora y fauna local, y son ideales para aquellos que buscan explorar la naturaleza en su estado más puro.
Los alrededores también ofrecen una gran cantidad de opciones para los amantes de los deportes al aire libre. La región es ideal para practicar senderismo, ciclismo de montaña, escalada en roca y pesca.
La belleza natural de la región, unida a su rica historia y cultura, lo hacen un lugar único y memorable para visitar.
